Deudas de autónomos en Canarias: Soluciones Legales para Recuperar el Control

El colectivo de trabajadores autónomos en Canarias, y de hecho en toda España, se encuentra en una encrucijada. Las denuncias de la Unión de Trabajadores y Profesionales Autónomos (UPTA) arrojan luz sobre la grave situación de precariedad económica que enfrentan estos profesionales. Tasadores hipotecarios que ganan apenas 6 euros la hora, profesionales de la salud en la esfera privada que reciben 16 euros por paciente, abogados que, a pesar de trabajar en condiciones similares, no alcanzan los mil euros mensuales; estas realidades subrayan la urgencia de actuar.

La Llamada a la Acción por UPTA

Eduardo Abad, presidente de UPTA, no ha titubeado en su denuncia: la actual situación es "una auténtica vergüenza". La precarización no solo ha tensado la economía de miles de autónomos, sino que también ha desencadenado problemas psicológicos y reducido considerablemente la calidad de sus servicios debido a plazos de entrega inasumibles.

Desde UPTA, la demanda es clara: un alto al "saqueo del colectivo". La organización planea emprender acciones con diversas administraciones, buscando redes y cambio.

Posibles Soluciones Legales

Una de las vías para abordar esta problemática es la Ley de la Contratación Pública. UPTA busca impulsar cambios significativos en esta ley. Además, tomará medidas contra la contratación de falsos autónomos y luchará contra aseguradoras que subvaloran y subpagan servicios sanitarios.

La necesidad de reequilibrar la relación entre proveedores y clientes principales es evidente. Abad recalca que "la redistribución de la riqueza" no es solo un tema de trabajadores por cuenta ajena.

Consecuencias a Largo Plazo

De no abordarse, esta precarización podría llevar a la destrucción del mercado laboral tradicional. Miles de autónomos, que deberían estar registrados como trabajadores por cuenta ajena, se ven atrapados en este sistema.

Conclusión

La lucha de los autónomos en Canarias y el resto de España demanda atención. Mientras que soluciones legales como la Ley de la Segunda Oportunidad pueden ofrecer algún respiro a aquellos abrumados por las deudas, es esencial abordar las raíces estructurales de la precarización. Las voces de UPTA y otros similares son un recordatorio urgente de la necesidad de cambio.